martes, 29 de marzo de 2011

Tu sonrisa.

Me encanta, simplemente me encanta. Me da igual si tienes los dientes torcidos, pequeños, grandes... Me da igual. Me gusta, me encanta. Cuando sonríes, se te ilumina la cara, tu preciosa cara. Mírame, mírame y demuéstrame que de verdad eres tan perfecto, que eres único que no hay otro. Hazme saber que tu sonrisa será mía, que cuando sonríes de esa forma tan especial será por mi. Que creo que te quiero, no, no lo creo. Lo sé. Sonríe, ábreme el mundo y el corazón.

Burned.

Me quemó. Sus llamas me destrozaron, me hicieron cenizas, me mataron, sin piedad, me mataron. Su corazón era un mechero y yo lo encendí. Fue imposible de apagar, llamas y llamas, sin control arrasando con todo, con todo. Parecía un juego, pero era todo un reto. Porque cuando juegas con fuego, te quemas.

domingo, 27 de marzo de 2011

Mañana.

No será igual. Ya no serás mio, ya no te besaré al verte, ya no estaré junto a ti. Todavía sueño contigo y conmigo, viviendo una vida. Pero es solo un sueño. Un sueño. Nada de eso es real, nada de eso volverá a pasar. Te veré pero no será igual. No lo será. Pero quiero pasar pagina, y ser otra. Otra sin ti. Y aunque quiera, mi corazón seguirá sintiendo, latiendo. Sin darme cuenta, pronto seré de otro, y el amor pasará sin más. Se irá y no dirá adios, adios amor. Porque cariño, mañana ya no serás mío. Mañana nada será igual.

Shiver.

Fue un escalofrío. Me recorrió todo el cuerpo, es verdad. Lo sentí, y estabas cerca, muy cerca. Es lo que me pasa continuamente, solo al escuchar tu nombre, entonces el escalofrío, el escalofrío me recorre el cuerpo. Como una corriente eléctrica, el corazón se para un segundo y el escalofrío se desvanece. Y siento un escalofrío cuando oigo tu nombre, cuando me doy cuenta que tu corazón dejo de ser parte del mio.

Fallen.

Has caído. Has caído y ahora no sabes como levantar, y tu cuerpo te pesa y no puedes, no puedes. Has de saber que nadie te ayudará que te quedarás ahí por siempre, tendido en el suelo. Porque es culpa tuya caer, solo culpa tuya. Siempre te hemos ayudado, y te hemos levantado pero ahora no te ayudaremos. Es lo que pasa cuando pasas el límite. Y es peor porque te lo avisamos, pero tu decidiste no hacernos caso. Y ahora has caído, has caído y nadie te levantará. Nadie te levantará.

Diferente.

Odio ese prototipo de personas, con una rutina, unas obligaciones, y un  patrón. Y yo me pregunto, ¿por qué? Es que acaso no hay otra salida, otro camino, una alternativa diferente a los demás. Sí, algo que te haga ser distinto a los demás. Libre. Sí, quiero ser libre, hacer lo que quiera  sin que nadie pueda ponerme un límite. Ojalá todo eso fuera posible. No soy una maleducada ni una grosera, que va, nada de eso. Solo que no quiero ser como los demás. Quiero ser diferente.